¿Por qué son más comunes estas molestias en Navidad?
Durante las fiestas navideñas, solemos modificar nuestros hábitos alimenticios y de estilo de vida, lo que puede desencadenar problemas digestivos. Algunos de los factores más habituales son:- Comidas copiosas: los menús navideños suelen incluir varios platos ricos en grasas, azúcares y condimentos que dificultan la digestión.
- Alcohol y bebidas gaseosas: estas bebidas, habituales en las celebraciones, pueden irritar el estómago y favorecer el reflujo ácido.
- Falta de actividad física: entre cenas y sobremesas prolongadas, solemos pasar más tiempo sentados, lo que puede ralentizar el proceso digestivo.
- Estrés y falta de sueño: las prisas y las preocupaciones propias de las fiestas también pueden influir negativamente en la salud digestiva.
Consejos para evitar las digestiones pesadas y la acidez en Navidad
Aunque estas molestias pueden parecer inevitables, pequeños cambios en los hábitos pueden marcar una gran diferencia:- Modera las raciones: disfruta de todos los platos, pero en cantidades moderadas. Así evitarás la sensación de pesadez tras las comidas.
- Mastica bien los alimentos: comer despacio y masticar bien ayuda al estómago a procesar mejor la comida.
- Evita acostarte justo después de comer: procura dejar pasar al menos dos horas antes de ir a la cama para dar tiempo a tu estómago a digerir.
- Incluye alimentos digestivos en el menú: añade frutas como la piña o el kiwi, que ayudan a la digestión, y termina las comidas con una infusión digestiva.
- Controla el alcohol y las bebidas gaseosas: opta por agua o bebidas no carbonatadas entre las copas para evitar irritar el estómago.
Soluciones para aliviar las molestias durante las fiestas
Si a pesar de los cuidados surgen problemas digestivos, existen soluciones eficaces que puedes encontrar en tu farmacia:- Antiácidos: alivian de forma rápida la acidez estomacal, neutralizando el exceso de ácido.
- Protectores gástricos: útiles para prevenir molestias en personas con tendencia al reflujo o gastritis.
- Infusiones digestivas: de hierbas como manzanilla, menta o anís, ideales para calmar el estómago tras comidas abundantes.
- Probióticos: ayudan a equilibrar la flora intestinal, mejorando el proceso digestivo y reduciendo el hinchazón.